Rafael Luis Carballo López
Liliana Mª Soto Ruiz

 


1. INTRODUCCIÓN

La experiencia pedagógica que se presenta, se desarrolló desde el curso 2001-2002 en el C.P.E.I.P. José Romero Macías de Aroche (Huelva) y fue diseñada y revisada por el equipo de maestros de Educación Especial; tras realizar una reflexión sobre nuestra práctica educativa, se detectaron deficiencias en nuestros alumnos dentro de los ámbitos de la participación, la creatividad y progresos en los aspectos instrumentales del lenguaje receptivo y productivo. Junto a esto, analizando las características de nuestros alumnos con necesidades educativas especiales, se destacan dos hechos condicionantes:

a) Por un lado, el contexto en el que esta experiencia se desarrolla es un contexto rural, donde nuestros alumnos consumen mucha televisión sin reflexionar sobre los aspectos positivos y negativos que el uso de la televisión implica.
b) Al mismo tiempo, las necesidades educativas especiales de nuestros alumnos están asociadas, en gran medida, a dificultades de estructuración del lenguaje.

Por tanto, resultaba evidente que se necesitaba encontrar un medio que potenciara no sólo su participación sino también su capacidad creadora y evitara que los alumnos siempre sean meros receptores de las historias que otras personas habían escrito. Ante esto nos preguntamos, ¿Cuál es el instrumento social que más incide en nuestros alumnos? Sin lugar a dudas, la televisión. Pues vamos a utilizar esa “caja” delante de la cuál tantas horas pasan nuestros alumnos para desarrollar su lenguaje, aprender nuevos usos de éste, conocer personajes y lugares, etc.
Tras llegar a esta conclusión se decidió plantear la hipótesis del proceso Investigación ? Acción:

«En la medida que nuestros alumnos tengan una mayor formación creativa y crítica, lo cual incluye, no sólo el dominio de técnicas instrumentales, sino también un concepto más amplio de los usos del lenguaje a través del mundo de la imagen y el sonido, podrán ser personas activas y responsables en la sociedad en la que viven».

De este modo nació el Canal Telelápiz. Esta propuesta interactiva utiliza un medio de comunicación tan cotidiano para los alumnos como es la televisión.

En nuestras aulas la televisión se trasforma en algo dinámico y no sólo receptivo, el alumno asume distintos roles del mundo de la comunicación, él es el guionista, el presentador, el decorador...
En Telelápiz, los niños trabajan los cuatro ejes fundamentales del lenguaje: escuchan, hablan, leen y escriben, todo ello desde la propia creación, convirtiéndose el factor creativo en fuente de motivación y superación constante, donde el maestro es tan sólo un mediador que canaliza y reconduce hacia procesos de aprendizaje los distintos intereses de los alumnos.
Es este potencial creativo el que también lleva a los niños a ser ellos sus propios evaluadores a partir del visionado de los distintos espacios que han realizado.

  Este trabajo minucioso, nos deja como resultado un acercamiento activo y dinámico del niño a la consecución de los distintos objetivos curriculares, jugando a ser adultos potencian las habilidades sociales.

Las características más señaladas de esta televisión son: su inmediatez, su espectacularidad, su accesibilidad, su continuidad, su heterogeneidad y su pluralidad. Y todo ello desde un proceso de enseñanza ? aprendizaje que combina a diario el factor lúdico y creativo.

Pues en el fondo, para el niño con necesidades educativas especiales Telelápiz es una manera de jugar aprendiendo y para nosotros, sus maestros, Telelápiz es una forma de enseñar jugando.

2. OBJETIVOS.

Los ámbitos de actuación que desde un principio han venido guiando a Telelápiz son la cultura, el trabajo y el aprendizaje. Nuestras iniciativas giran en tomo a alcanzar los siguientes objetivos generales:

  • Potenciar y desarrollar con corrección la capacidad comunicativa de nuestros alumnos.
  • Adquirir técnicas de comunicación verbales y no verbales.
  • Mejorar la capacidad expresiva.
  • Facilitar el conocimiento crítico del lenguaje y el discurso televisivo.
  • Conocer y utilizar expresivamente el lenguaje creativo de los medios.
  • Saber valorar y enjuiciar activamente los mensajes televisivos (publicidad).
  • Ampliar el vocabulario.
  • Articular y vocalizar de forma correcta.
  • Potenciar un adecuado desarrollo morfosintáctico.
  • Desarrollar la capacidad de síntesis.
  • Mejorar los procesos psicolingüísticos y lectoescritores.
  • Potenciar la capacidad de escucha.
  • Conseguir hábitos de buenos telespectadores, de consumidores críticos y creativos.
  • Desarrollar la atención.
  • Favorecer el trabajo en equipo.
  • Educar para un ocio creativo.
  • Alcanzar una posición activa con los massmedia.
  • Favorecer una toma de postura crítica a través de la cultura televisiva.
  • Adquirir una capacidad de autoevaluación y crítica constructiva.

3. METODOLOGÍA.

3.1. PRICIPIOS METODOLÓGICOS.

En Telelápiz, se trabaja de forma planificada, sistemática e integral. Se trabaja el dominio de la comunicación oral como requisito básico y elemento preventivo para dominar la lengua escrita. Se trabaja la competencia oral comprensiva y sobre todo expresiva del alumno y ello de forma práctica. "A hablar se aprende hablando", por tanto, no se considera al alumno como un interlocutor pasivo; con ello, se crea un clima de libertad y confianza y al mismo tiempo, evitando las correcciones, eliminamos los inconvenientes que inhiban cualquier intento de participación y, por tanto, de aprendizaje. La comunicación espontánea sale favorecida.

Entre las técnicas que se utilizan están: la expresión libre y creativa, el diálogo orientado, las dramatizaciones, el entrenamiento en distintas técnicas comunicativas, la optimización de las habilidades sociales y el juego simbólico.

Los ejercicios de expresión oral se relacionan con la vida, intereses, exigencias y experiencias de los alumnos (aprendizaje funcional), así como con los temas que en ese momento se trabajan en el curso y los temas propuestos por ellos; de esta forma Telelápiz tiene un carácter más funcional
La enseñanza de la lengua escrita se realiza también de forma participativa, teniendo en cuenta las necesidades individuales, y los intereses de cada niño como persona.

Con Telelápiz, se da importancia a la creatividad en el lenguaje tanto oral como escrito.

  Por tanto, se define la metodología de Telelápiz como una estrategia lúdica, creativa y de disfrute del lenguaje en todas sus formas. Es decir; una metodología que parte del nivel de desarrollo del niño, de aquello que ya ha conseguido (aprendizaje significativo) parte de la capacidad comprensiva y expresiva del alumno, lo cual permite y favorece el desarrollo integral, una metodología que tiene como referencia su mundo y su experiencia (conocimientos previos), su cultura (Andaluza), su pueblo (Aroche).

De esta forma, basándonos en el principio de comunicación y empleando una gran variedad de recursos materiales y de forma gradual (de lo fácil a lo difícil), conseguimos que el trabajo del aula sea motivador para el niño.

Podemos afirmar que el modelo educativo del Canal Telelápiz es integral, en la medida que supone una integración de las actividades educativas en la experiencia televisiva, una integración del alumno en su medio social y una integración en las áreas de conocimiento.
En definitiva, la metodología de Telelápiz es activa, participativa, abierta, personalizada, flexible, lúdica, sistematizada y globalizadora.

3.2. CONTENIDOS.

La metodología para alcanzar estos objetivos se inserta en un proceso educativo en el que se desarrolla nuestra actuación, y utiliza una serie de contenidos debidamente estructurados que se exponen a continuación.
Para alcanzar estos objetivos y como parte de un proceso educativo en el que nos encontramos inmersos, y, por tanto, en el que se desarrolla nuestra actuación, se diseña una serie de contenidos debidamente estructurados.


3.2.1.CONCEPTOS.

  • La televisión como fuente de conocimiento.
  • Gusto y preferencias televisivas.
  • La planificación y el guión.
  • El lenguaje audio visual.
  • La producción televisiva.
  • El visionado crítico y activo.
  • Ocio y televisión.
  • Vocabulario del ciclo (verbos, nombres, adjetivos, expresiones, etc.)
  • Los sonidos.
  • Elementos: pronunciación, ritmo, etc.
  • Las intenciones comunicativas.
  • La ortografía.
  • Habilidades sociales

    Técnicas comunicativas.

  • Los textos orales en situaciones de intercambio: conversación diálogo, coloquio, debate...

  • Los tipos de mensajes. Verbales (Orales y escritos) y no verbales.

  • Percepción auditiva y fonemática.

  • Lenguaje articulado.

  • Lenguaje comprensivo.

  • Lenguaje expresivo ? productivo.

3.2.2. PROCEDIMIENTOS.

  • Planificación de la producción televisiva.
  • Observación crítica y objetiva de la planificación personal televisiva.
  • Análisis de modelos de visionados televisivos.
  • Elaboración de compromisos personales (contrato).
  • Desmitificación de la publicidad.
  • Consultas y comparaciones de programas televisivos.
  • Expresión creativa mediante la creación de programas y mensajes audiovisuales.
  • Distinción del medio televisivo y de otros medios de comunicación por su tipo de discurso.
  • Obtención de información mediante cuestionarios, visitas y entrevistas (ideas, intereses, evaluación) .
  • Elaboración de documentos (distintas fichas).
  • Análisis del tiempo de visionado.
  • Reflexión, debate y evaluación sobre las distintas actividades.
    Una característica común en todos estos contenidos procedimentales es la conexión de Telelápiz con las distintas programaciones del aula ordinaria y /o de las aulas de apoyo a la integración. (Pedagogía Terapéutica y Audición y lenguaje).


3.2.3 ACTITUDES.

  • Prestar atención.
  • Mostrar interés por comunicarse de forma correcta.
  • Gusto por la lectura y la escritura como medios de comunicación.
  • Mostrar interés por el trabajo en Telelápiz.
  • Interés por participar en esta experiencia.
  • No salirse del tema al hablar y responder durante el proceso.
  • Sensibilidad, tolerancia y flexibilidad ante las opiniones y aportaciones de los otros.
  • Respetar normas empleadas en las diferentes formas de comunicación (diálogos, debates...) respetar turnos, no interrumpir, respetar opiniones expresadas por los demás...
  • Realizar el trabajo con seriedad, orden, limpieza y responsabilidad.
  • Reconocimiento del trabajo de equipo en la producción televisiva.
  • Interés por las estrategias que llevan a un aprendizaje activo y creativo dentro del mundo televisivo.
  • Interés por la planificación personal, consciente y racional.

3.3. CRITERIOS DE SELECCIÓN Y AGRUPAMIENTO DE LOS ALUMNOS:

Una vez puesto en marcha el proceso se crea con nuestros alumnos grupos de espacios televisivos, lo cuál requiere la captación de alumnos a través de una campaña en la que los maestros partimos de los intereses de los alumnos. Aunque no se debe olvidar que en ellos existen diferentes niveles de necesidad.

Los alumnos destinatarios de la experiencia educativa, son los alumnos de las aulas de apoyo a la integración.

La selección de alumnos se hace en Telelápiz, siguiendo unos criterios que están en función de las necesidades y dificultades que estos alumnos presentan:

  • Necesidades de comunicarse.
  • Problemas en el lenguaje (En la forma, en el contenido y /o en el uso) .
  • Necesidades de socialización.
  • Interés por la tarea.
  • Falta de creatividad y de motivación.

Una vez seleccionado, al alumno se le realiza un "contrato" de participación en Canal Telelápiz, contrato en el cual se especifica su rol de presentador, reportero, cámara... y contrato que es firmado por el propio alumno y por el director de Telelápiz que es una mascota llamada Mauricio Don Lápiz; el cuál presenta y enseña a los niños la sintonía del canal.

La experiencia pedagógica “Telelápiz” fue diseñada y planificada durante dos cursos académicos. Para su desarrollo se contó con una serie de recursos materiales y humanos.

Entre los recursos materiales utilizamos varios decorados en el aula (platós de televisión), cámaras de vídeo, cintas VHS, cámaras de fotografía digital, equipo de música, ordenador, así como nuestras fichas de trabajo estructurado. En cuanto a recursos humanos contamos con nuestros alumnos con necesidades educativas especiales y nosotros, sus profesores de las aulas de apoyo a la integración (Audición y Lenguaje y Pedagogía Terapéutica)

4. DESARROLLO DEL PROYECTO.

Esta experiencia pedagógica consta en su proceso metodológico; de unas fases delimitadas y encuadradas dentro del ciclo de la investigación ? acción (reflexión, planificación, implementación ? acción, reflexión):

  • Reflexión: Fase 1 y Fase 2
  • Planificación: Fase 3 y Fase 4
  • Implementación ? Acción: Fase 5 y Fase 6
  • Reflexión: Fase 7, evaluación e introducción de modificaciones.
    En las próximas líneas analizaremos detenidamente las fases que marcan nuestra actuación.

FASE 1: IDEAS.
Es este un momento de reflexión en el que se suceden consecutivamente cuatro pasos: Exposición de intereses de los alumnos, discusión en la clase del tipo de espacio televisivo, tomar como punto de partida la experiencia de los alumnos y finalmente, elección de los centros de interés. Teniendo en cuenta los acontecimientos que en ese momento tengan relevancia en nuestro centro o localidad y marcando de este modo las directrices de la programación.

En resumen, la característica inicial de Telelápiz es que parte de las inquietudes de nuestros alumnos. Son ellos los que deben proponer las ideas. Con ellas, comenzamos a trabajar canalizándolas nosotros como mediadores del proceso, hacia aspectos curriculares. Todo ello a través de una ficha denominada "Ideas" y cuyo logotipo es una bombilla .

FASE 2: INVESTIGACIÓN.


Esta fase supone la recopilación de datos contextualizados en nuestro entorno a través de distintas fuentes. Esta indagación supone la combinación de tareas individuales y colectivas, y en ocasiones exige salidas al entorno.

A partir de este momento, los ámbitos de actuación son la cultura, el trabajo y el aprendizaje.
Como buenos profesionales de un medio comunicativo, antes de elaborar sus noticias, programas... nuestros alumnos deben pasar por una fase de recogida de datos e información; esta fase, encuadrada dentro de las teorías del aprendizaje significativo de Aussubel nos llevará a un aprendizaje interactivo por descubrimiento.

Nuestros alumnos acuden a diversas fuentes, contrastan información, y a través de un aprendizaje vicario, captan los diferentes tipos de discurso actualmente vigentes en nuestra televisión. Por ejemplo nuestro "meteorólogo", primeramente ha observado como hoy en día se retransmite la información del tiempo en televisión y es ese modelo el que se convierte en su línea base a la hora de trabajar en clase quedando perfectamente delimitado el rol que él desempeña, y de igual forma sucede con los distintos alumnos.

FASE 3: BORRADOR.

Llegado a este punto el alumno debe desarrollar su idea previa ya documentada. Este primer intento creativo de crear un guión quedará registrado en las “fichas borrador”, pues se concibe como una planificación del proceso que será revisada tanto por el profesor como por el propio alumno. Probablemente, se introducirán modificaciones antes de pasar a la fase de elaboración del guión definitivo.

FASE 4: GUIÓN.

La elaboración del guión literario y técnico supone el mayor esfuerzo cognitivo, pues implica no sólo la conexión de todas las ideas y los datos que han fluido durante la realización de todas las actividades previas, sino, también, la puesta en práctica de diferentes destrezas lingüísticas de carácter técnico y creativo, como son la capacidad descriptiva y redactora del alumno, el uso de vocabulario nuevo, la capacidad de síntesis, el adecuado desarrollo morfosintáxtico...

FASE 5: ENSAYO.

El ensayo conecta de forma imprescindible con la fase de grabación. Es el primer contacto del alumno con el "plató", con la cámara y sobre todo es el primer acercamiento al fruto de su trabajo. Implica decorar un escenario y establecer un trabajo coordinado del equipo, respetando tanto el guión técnico como literario. En esta fase se enfatiza la importancia de una buena comunicación verbal y no verbal; pronunciación y articulación, entonación adecuada, comunicación gestual, puesta en práctica de distintas habilidades sociales y comunicativas.

FASE 6: GRABACIÓN.


Esta fase es la ejemplificación del trabajo, un trabajo muy estructurado que no por ello la hace más fácil. Consiste en hacer las tomas de la grabación; es la acción materializada.
En este momento interactúan distintos factores tanto técnicos como psicoemocionales. El alumno es consciente de la importancia de ella y aunque contamos con la fase anterior de ensayo, pueden acontecer momentos de ansiedad en los alumnos que se traducen en risas, bloqueos, alteraciones del guión, improvisaciones... y un largo etc. no previsible y por ello no controlado (variable extraña) por los mediadores del proceso, en este caso los maestros de educación especial del centro. Es una fase vivida, de manera especial, es casi la culminación de un trabajo en el que ellos han sido los creadores protagonistas y responsables.

FASE 7: VISIONADO.

El visionado se realiza en pequeño, mediano y gran grupo. Tras él abrimos un coloquio sobre los aspectos que más nos han gustado, que más esfuerzo nos han supuesto etc. En esta reflexión colectiva se debe evaluar el impacto final en la audiencia.

5. EVALUACIÓN.

La evaluación facilita la posterior mejora de Telelápiz, centrándose en cuáles son los objetivos; qué se va a evaluar, quién lo va a evaluar y cuándo se va a evaluar
La evaluación presenta tres objetivos fundamentales:

  • Medir el grado de idoneidad, eficacia y eficiencia de “Telelápiz”.
  • Facilitar el proceso de toma de decisiones del colectivo sobre el programa.
  • Fomentar un análisis prospectivo sobre cómo debe ser el programa futuro.

Se pretende evaluar:

a)La respuesta a las necesidades de los alumnos.
b)El diseño del programa.
c)EL proceso y desarrollo del programa.
d)Los resultados del programa.

La responsabilidad última de la evaluación recae en el equipo de maestros, aunque los agentes de la evaluación sean los propios alumnos junto con sus maestros, estando establecida la participación en unos momentos concretos para cada uno. Por tanto, se concibe la evaluación como un proceso participativo lo que conlleva la comunicación de los resultados a los alumnos. La evaluación recoge y analiza información sobre si el programa está contextualizado; sobre la consecución de objetivos y a cerca de la temporalización y recursos utilizados.

Los criterios de evaluación en Telelápiz, nacen de los objetivos propuestos, así el mayor o menor grado de consecución estará en función de si el alumno:

  • Ha desarrollado con corrección la capacidad comunicativa.
  • Ha adquirido técnicas de comunicación verbales y no verbales.
  • Ha mejorado la capacidad expresiva.
  • Hace un uso crítico del lenguaje y del discurso televisivo.
  • Conoce y utiliza expresivamente el lenguaje creativo de los medios.
  • Sabe valorar y enjuiciar activamente los mensajes televisivos (publicidad).
  • Ha adquirido nuevo vocabulario.
  • Articula y vocaliza de forma correcta.
  • Ha alcanzado un adecuado desarrollo morfosintaxtico.
  • Ha optimizado su capacidad de síntesis.
  • Mejora en los procesos psicolingüísticos y lectoescritores.
  • Ha potenciado su capacidad de escucha.
  • Desarrolla hábitos de buen telespectador, de consumidor critico y creativo.
  • Aumenta los periodos de atención.
  • Sabe trabajar en equipo.
  • Desarrolla una forma de ocio creativo.
  • Se sitúa en una posición activa ante los massmedia, o sigue con una postura simplemente receptiva.
  • Adopta una postura crítica a través de la cultura televisiva.
  • Adquiere una capacidad de autoevaluación y crítica constructiva (reflexión sobre la acción).

Como instrumentos de evaluación se utiliza:

a)Observación sistemática del proceso (directa e indirecta).
b)Fichas de seguimiento y evaluación cumplimentadas por los alumnos.
c)Diversos documentos de recogida de datos (notas del profesor durante el proceso, el visionado, etc.).

La evaluación se realiza en tres momentos:

a)Antes de comenzar el desarrollo del programa (fase 1, fase 2, fase 3, fase 4).
b) Durante el desarrollo del programa (fase 5, fase 6).
c) Al finalizar la actuación del programa (fase 7, fase 8, fase 9).

El carácter continuo de la evaluación permite la introducción de modificaciones dentro de todo el ciclo de investigación acción. Con esta medida se pretende mejorar el proceso para posteriores aplicaciones desde la reflexión de todo lo realizado.

Una vez, realizado un determinado espacio televisivo, se extrae y se analizan las conclusiones esperadas y no esperadas que han surgido a lo largo de la evaluación continua. Es este el momento de redefinir el proyecto con una perspectiva de mejora siendo fieles al enfoque cíclico de la investigación acción. Es esta de nuevo nuestra primera fase, aquella de la que hablábamos al principio, de donde nacía todo y por tanto, reformulando la hipótesis de partida de este proceso de investigación ? acción que es Canal Telelápiz; dejamos una pregunta abierta:

¿Se consigue una rehabilitación lingüística y una formación más creativa y crítica de nuestros alumnos a través de este trabajo televisivo?

Esta pregunta nos invita a reflexionar sobre nuestra propia praxis (investigación ? acción) y una vez más nos conduce a reiniciar este proyecto psicopedagógico de Canal Telelápiz.

6. CONCLUSIONES.

Tras la implementación de este proyecto psicopedagógico durante un periodo de dos años académicos, estamos en condiciones de poder extraer una serie de indicadores que, a modo de conclusiones, nos hagan valorar cualitativamente los resultados que la aplicación de este proyecto ha generado en nuestro grupo de alumnos con necesidades educativas especiales.
Se observa una estimulación de su interés y curiosidad intelectual, frente a la pasividad detectada antes de la puesta en marcha del proyecto.

Se produce mejoría en el desarrollo de las capacidades psicolingüísticas.
Se constata que ha aumentado la información de los alumnos, no sólo en cantidad al abarcar múltiples temas, sino también en calidad, porque la información por ellos recogida supone una estructuración y elaboración previa a una emisión de los datos contextualizados desde su propia perspectiva. Garantizando, de este modo, la significatividad del aprendizaje.

Se consigue una formación más creativa, ya que a través de la metodología de Telelápiz nuestros alumnos han desarrollado la utilización de diversos usos del lenguaje. Pues los códigos audiovisuales empleados son distintos en la redacción de una noticia, un reportaje, en la creación de un cortometraje, en el diseño de un anuncio publicitario... En consecuencia, se manifiesta un importante incremento en el vocabulario, así como, en la capacidad de estructuración lingüística.
Además, el lenguaje de esta televisión les ha permitido una comprensión más directa de los contenidos curriculares por el apoyo gráfico de la imagen y les ha educado en el entrenamiento de habilidades sociales optimizando su socialización y autonomía personal.

Hoy Telelápiz adquiere un nuevo reto, con la creación de nuestra página web instrumento que pretende ir más allá del aula acercando a los niños a otros contextos escolares e introduciéndose en el uso de las nuevas tecnologías aplicadas a la educación.

Toda nuestra propuesta metodológica persigue hacer de las aulas de apoyo a la integración un espacio que promueve y posibilita nuevas experiencias y recursos a nuestro alumnado con el fin de que alcancen la normalización en su medio escolar y en su contexto social más próximo.


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