Richard Mababu Mukiur
ENRED Consultores
Madrid
El concepto de teleformación o "e-learning"


Hay tantas definiciones de teleformación como autores. No obstante, las características de la teleformación pueden resumirse de la manera siguiente:

  • Separación física entre profesor y alumno, ubicados en sitios geográficamente distintos.
  • Uso de soporte tecnológico para asegurar la comunicación entre profesor y alumno.
  • Existencia de comunicación bilateral (síncrona y/o asíncrona) de manera que se establezca retroalimentación entre profesor y alumno.
  • La formación personalizada está garantizada.
  • Posibilidad de incorporación de los avances tecnológicos y su uso sistemático en el proceso de teleformación

Sin entrar en las polémicas habituales que rondan la definición de este concepto, entendemos por "teleformación" el proceso de adquisición de conocimientos, habilidades y actitudes, con el uso de las TIC, sin la necesidad de que el profesor (o formador) y alumno (formando) estén en el mismo espacio físico ni temporal. Este planteamiento coincide con el concepto anglosajón "e-learning" que presentamos aquí como sinónimo de teleformación.

1.1. De la enseñanza por correspondencia al Entorno Virtual de Aprendizaje

El origen de la teleformación ha sido la enseñanza por correspondencia. Ésta ha sido practicada a través de varias generaciones, ofreciendo la instrucción o formación a distancia. Exceptuando algunas prácticas aisladas en algunos monasterios durante la Edad Media, los datos de aplicación sistemática de la enseñanza a distancia se remontan a los años 1720 (Holmberg, 1989, Tapscott, 1997). Desde entonces, la teleformación ha progresado en tres etapas que corresponden con las tres generaciones de la enseñanza a distancia:

GENERACIONES DE LA ENSEÑANZA A DISTANCIA
Primera etapa: Formación a distancia con la imprenta

  • Estudios a distancia por correspondencia con materiales impresos (imprenta)
  • La comunicación es asíncrona (la comunicación no es en tiempo real)
  • La interacción es mínima
  • Medios: textos impresos, correo postal
Segunda etapa: Formación a distancia con multimedia

  • Estudios a distancia (por correspondencia) con materiales multimedia y de difusión masiva
  • La comunicación es básicamente asíncrona
  • La interacción es mediana
  • Medios: correo postal, multimedia (textos, sonidos, imágenes, animación y vídeo), radio, casete de audio, cinta de vídeo
Tercera etapa: Formación a distancia con las TIC = teleformación

  • Uso de materiales con soporte de TIC
  • Estudios a distancia con materiales multimedia y de difusión masiva (casete de audio, cinta de vídeo, radio)
  • La comunicación es básicamente síncrona (en tiempo real) con el uso frecuente de comunicación asíncrona, como correo electrónico, debate en lista de distribución, etc.
  • La interacción es alta
  • Medios: telecomunicaciones vía televisión (satélite y cable) y ordenador con videoconferencia (vía RDSI, fibras ópticas, etc.).

La "Enseñanza por correspondencia" tuvo su auge en la cultura occidental con la utilización de materiales impresos para ser distribuidos a un amplio número de estudiantes geográficamente dispersos. La interacción entre formador y formando es mínima ya que la única forma de comunicación entre ellos son textos y cartas por correo postal.

La "Enseñanza a distancia con multimedia" se desarrolló desde la década de los años 60, incorporando el uso de varios medios de comunicación: casetes, radio y la utilización muy limitada de la televisión y de ordenadores. La retroalimentación entre formando y formado es similar a la de la primera generación (por correspondencia, principalmente), pero incluyendo ya la tutoría por teléfono. La gran explosión de la enseñanza a distancia, tanto a nivel conceptual como práctico, ha tenido lugar durante esta segunda generación, particularmente durante las décadas de los años sesenta y setenta.La "Teleformación" se ha hecho efectiva en la educación en la década de los noventa (aunque se usó de manera experimental en las décadas anteriores). Esta tercera generación se corresponde con el uso de las telecomunicaciones. Utiliza las TIC en la enseñanza a distancia y ha generado el concepto de teleformación. Su gran novedad es la rapidez de la interacción y facilidad en la creación, almacenamiento y distribución de la información. Esta tercera etapa da prioridad a la formación utilizando procesos de comunicaciones síncronas y asíncronas, haciendo uso de la transmisión de sonido, vídeo y datos (Seely-Brown, J. & Duguid, P., 2000; Majó, J. y Marquès, P., 2002). Los entornos virtuales de aprendizaje que ofrecen las plataformas de teleformación en Internet / Intranet forman parte de esta tercera generación.

1.2 Teleformación: un paso hacia la gestión de conocimiento

Ya son numerosas las instituciones que están aprovechando las tecnologías para impartir cursos y seminarios, buscando la realización del proceso formativo sin barreras de distancia ni temporales. El alumno puede optar por seguir los cursos a su propio ritmo desde su casa, puesto de trabajo u otro sitio diferente del lugar del profesor. La teleformación ofrece numerosas ventajas:

Ventajas de la teleformación

   Familiaridad con las
   tecnologías

  La teleformación permite familiarizarse o perfeccionar el uso de las nuevas tecnologías   (entorno Windows, foros, correo electrónico, navegación por Internet...).
 
   Flexibilidad en la    gestión del tiempo

  La teleformación permite que cada alumno elija libremente cuándo desea aprender   según   su disponibilidad diaria y horaria.
  
    Flexibilidad  geográfica

  Los alumnos pueden acceder al curso desde cualquier lugar donde dispongan de un   ordenador con conexión a Internet (desde su propia casa, su puesto de trabajo, una   biblioteca o un banco del parque al sol si cuentan con un ordenador portátil).
  
    Participación

  Al personalizar la formación, el formando interactúa más con el formador y/o con el   tutor.
  
    Teletutoría

  Existe la figura del teletutor para acompañarle durante todo el proceso educativo.

   Adaptación al    alumnado

  La teleformación permite diseñar estructuras denominadas "multinivel" en las que el   alumno   decide, en función de su nivel de partida y objetivos, dónde empezar y hasta   dónde llegar,   marcando su propio ritmo de aprendizaje.

   Evaluación y    certificación de    conocimientos

  Los cursos de teleformación pueden incluir evaluaciones intermedias para orientar a   cada   participante sobre su avance. Además, muchas instituciones formativas de   reconocido   prestigio ofrecen certificación oficial tras superar una prueba o examen   final, homologando   el título a los concedidos en cursos presenciales.

Pero presenta también algunos inconvenientes:

Inconvenientes de la teleformación

   Necesidad de disponer    de   herramientas    tecnológicas

  Como mínimo se ha de contar con un PC conectado a Internet o a una   Intranet.

   Exigencia de    conocimientos
   informáticos

  Al menos hay que tener nociones básicas de entorno Windows,   navegación por   Internet y uso de correo electrónico.

   Metodología de    autoestudio

  Se exige al alumno un mayor esfuerzo, mayor disciplina que en la   formación   presencial.

   Falta de contacto directo    con los   compañeros

  Puede provocar sensación de soledad y aislamiento, facilitando la   desmotivación del   alumno. Sin embargo, sí existe al menos la posibilidad de   contacto telemático.

    Falta de contacto
   directo con el   profesor

  Dificulta la comunicación con el tutor, ya que la interlocución telemática   genera una   pérdida de "feed-back": no se perciben las expresiones de los   rostros, los gestos,   etc.

Figura 1. La tendencia integradora de la teleformación como gestión de conocimiento

Los procesos de aprendizaje en los próximos años serán cada vez más flexibles e integradores, compaginando diversas metodologías. La teleformación surge como una solución que permite estas características.

Sesiones presenciales: Aunque la teleformación sea una metodología básicamente a distancia, en cursos de mediana entidad pueden introducirse sesiones inaugural y final presenciales, o en su defecto “telepresenciales” (a través de videoconferencia).

Lecturas estructuradas: En la teleformación los contenidos están perfectamente estructurados, dando una respuesta planificada a una necesidad formativa. Se trata de lecturas replicables que obedecen a la impartición de conocimientos programados.

Lecturas informales: Los cursos de teleformación deben contener una bibliografía y enlaces de interés que permitan al alumno ampliar sus conocimientos.

Información variada: La teleformación es un medio idóneo para ofrecer al alumno todo tipo de información: artículos de prensa, gráficos, simulaciones, vídeos, audios, etc.

Intercambio de experiencias: El foro de debate y el "chat" son medios idóneos para el intercambio de experiencias entre alumnos, la puesta en común de ideas y soluciones, el análisis crítico, etc. Constituyen la base de un auténtico aprendizaje cooperativo, espontáneo y natural.

Prácticas: La teleformación posibilita la introducción de actividades prácticas al igual que cualquier curso presencial. De manera complementaria es una herramienta muy potente para introducir ejercicios de autoevaluación y simular casos prácticos.